En una carta, entregada en exclusiva a El Financiero, el aspirante a la presidencia En una carta, entregada en exclusiva a El Financiero, el aspirante a la presidencia.
En una carta, entregada en exclusiva a El Financiero, el
aspirante a la presidencia por Juntos Haremos Historia (Morena-PES-PT) asegura
que debido a que las encuestas le favorecen, el grupo en el gobierno ha lanzado
una campaña para atemorizarlos.
AMLO hace una síntesis de sus propuestas, su diagnóstico de
país y sus “intenciones de gobierno”. Les garantiza un cambio ordenado,
eliminar la corrupción, Estado de derecho, renegociar el TLCAN y un modelo
económico como el del “desarrollo estabilizador”. Recuerda que cuando gobernó
la capital tuvo una buena relación con el sector privado y que su manejo
financiero fue reconocido.
Este es el texto íntegro:
Como ustedes saben, estamos en plena campaña por la
Presidencia de la República con un ánimo social muy favorable que se refleja,
en las encuestas, con un margen de ventaja de 20% en la intención de voto y con
muchas probabilidades de triunfar. Esta circunstancia es el motivo por el cual
el grupo que ha ocupado el gobierno y que ha lucrado al amparo del poder público
en los últimos sexenios ha lanzado una campaña para atemorizar a empresarios e
inversionistas del país y del extranjero.
En tal situación me dirijo a ustedes para transmitirles, en
forma puntual y de primera mano, una síntesis de nuestro diagnóstico del país,
las propuestas que impulsamos y nuestras intenciones de gobierno:
1. Sostengo que el principal problema de México es la
corrupción y que vamos a erradicarla por completo. Además de moralizar la vida
pública, esto nos permitirá liberar cuantiosos recursos para el desarrollo y el
bienestar de la población. El Banco Mundial calcula que, en nuestro país, los
políticos corruptos y los traficantes de influencias se roban el 20 por ciento
del presupuesto público, es decir, más de un billón de pesos anuales.
2. Para mantener al gobierno subordinado a los intereses de
los traficantes de influencias, los funcionarios públicos mexicanos reciben
actualmente salarios elevadísimos y gozan de prebendas desmesuradas que no
tienen cabida en otros países. Los altos funcionarios públicos son de los
mejores pagados del mundo y ni los exmandatarios de Estados Unidos reciben
pensiones tan cuantiosas como las que disfrutan aquí los expresidentes; y otro
tanto sucede con los presidentes en activo; el avión de que dispone Enrique
Peña Nieto es más lujoso que el de Donald Trump.
3. Consideramos que sin corrupción y con un gobierno austero
podremos sacar a México de la crisis económica, del malestar y la pobreza, de
la espiral de inseguridad y violencia que actualmente padece. Para ello, no
hará falta aumentar impuestos ni incrementar la deuda del Estado; bastará con
honestidad en el gobierno y con una reducción del costo de la administración
para aumentar la inversión pública y utilizarla como capital semilla para
financiar proyectos productivos con la participación de la iniciativa privada y
del sector social.
4. En términos generales, el modelo económico que proponemos
es semejante al que se aplicó en el país en el periodo denominado del
“Desarrollo Estabilizador”. Con esa orientación la economía mexicana creció a
tasas del 7% anual, sin endeudamiento, inflación ni devaluación de la moneda.
No es nuestro propósito, desde luego, revivir un modelo del pasado y aplicarlo
de manera mecánica; pretendemos retomar las lógicas que funcionaron, ajustarlas
a las condiciones actuales y aplicarlas con una visión política distinta, de
pleno respeto a los principios democráticos y a la legalidad, en un entorno en
el que deben tomarse en cuenta factores tan diversos como la inserción de México
en la globalidad, el surgimiento de una nueva generación de derechos
individuales y sociales y una vertiginosa transformación tecnológica.
5. Seremos respetuosos de la autonomía del Banco de México;
no gastaremos más de lo que ingrese al erario, es decir, operaremos la
administración pública sin déficit.
6. Habrá un auténtico Estado de derecho, bajo el criterio de
que al margen de la ley nada y por encima de la ley, nadie.
7. El gobierno enfrentará y solucionará el grave problema de
la inseguridad y de la violencia. Todos los días encabezaré, desde muy
temprano, el gabinete de Seguridad para recibir personalmente el parte de las
corporaciones policiacas y militares y tomar las decisiones correspondientes.
Se conformará una guardia nacional y habrá coordinación entre todas las fuerzas
del orden de las regiones, estados y municipios.
8. Se acabarán los fraudes electorales y habrá una
democracia incuestionable.
9. El próximo gobierno respetará las libertades y no tomará
medidas autoritarias. No habrá confiscación de bienes. En cuanto a los
contratos otorgados por el actual gobierno en materia energética y obras
públicas, como de la construcción del aeropuerto de Texcoco, se revisarán uno a
uno para evitar casos de corrupción como los escándalos de Odebrecht; se
actuará siempre con apego a los procedimientos legales, protegiendo a quienes
hayan adquirido bonos y a los trabajadores afiliados a las Afores.
10. Reiteramos nuestra disposición a renegociar el Tratado
de Libre Comercio de América del Norte, pero consideramos conveniente que la
firma de los nuevos acuerdos se realice después de las elecciones del 1 de
julio para hacerlo en condiciones de equidad, dar margen a la construcción de
consensos en nuestro país y proteger a los sectores productivos de México;
asimismo, creemos que en el nuevo acuerdo deben estar incluidos asuntos de gran
relevancia como la fijación de salarios justos y las reglas migratorias. No
descartamos la posibilidad de convencer al presidente Donald Trump de su
despectiva y equivocada actitud contra los mexicanos. Estamos dispuestos a
mantener una relación de amistad y respeto mutuo. En su momento pondremos sobre
la mesa el programa de desarrollo para impulsar el crecimiento, generar empleos
y garantizar el bienestar, a fin de crear las condiciones para enfrentar de
manera conjunta las causas que originan la migración, la inseguridad y la
violencia. En resumen, consideramos que los problemas sociales que afectan las
relaciones bilaterales no pueden resolverse con muros ni con el uso de la
fuerza, sino con desarrollo y bienestar.
En suma, señores inversionistas, nuestra propuesta va
encaminada a lograr un cambio ordenado y pacifico para mejorar las condiciones
de vida y de trabajo de nuestros connacionales y que haga posible el
renacimiento de México.
"Tengan confianza. No somos rebeldes sin causa y
tenemos palabra. Sabemos cumplir nuestros compromisos. No se dejen asustar.
Recuerden que ya gobernamos la capital de la República y que establecimos allí
una buena relación con el sector privado, nacional y extranjero. En aquellos
tiempos el manejo financiero de nuestra administración fue reconocido en México
y en el extranjero y mereció una calificación Triple A por Standard &
Poor’s. Exhortamos a todos a actuar de manera informada, a no dejarse manipular
por las campañas de odio y a abstenerse de promover enconos, polarizaciones y
estados de pánico que ponen en riesgo la armonía social, lastiman las libertades,
contravienen la honestidad y socavan la democracia".
Con información de Nación321.