viernes, 8 de mayo de 2015

Paga ayuntamiento de Tlajomulco al narcoguarura de Enrique Alfaro

Evidencias de corrupción de un personaje de la derecha que navega con bandera de ciudadano y un falso discurso de izquierda, pero que es tan derechista como el ex gobernador Emilio González


Por Rosendo Martínez Fernández

Los abusos de los grupos que se han apoderado de las instituciones públicas se documentan con facilidad, pues ante la ambición de poder y el cinismo con que se conducen como si fueran dueños de una ciudad, un municipio o un estado, no les importa dejar huellas, porque con el tráfico de influencias que tienen con las mafias del poder todo lo solucionan.

Desde la izquierda hemos denunciado los malos manejos que se realizan en las instituciones públicas, tanto de nivel municipal, estatal como federal, ya que los actores políticos con total impunidad lucran con los bienes públicos como si fueran privados, lo que se traduce en corrupción.

No importa si se trata de bienes u objetos, programas sociales y hasta el propio personal que se emplea en estas instituciones, como el Ayuntamiento de Tlajomulco, en el estado de Jalisco, donde los ex acaldes aún gozan del privilegio de disponer de recursos como si aún ejercieran el poder ahí.

Esto podría interpretarse como el juego del poder en el cual cada alcalde elige a su sucesor y el que queda le debe agradecer eternamente, o por lo menos durante su periodo en el poder, al presidente municipal saliente.

Es el caso de Enrique Alfaro Ramírez, quien a pesar de que dejó la alcaldía de Tlajomulco en el año 2012, goza de privilegios como el contar con tres policías vigentes en la nómina municipal para su uso exclusivo como escoltas, lo cual es a todas luces ilegal, puesto que estos elementos de Seguridad Pública perciben un sueldo mensual en ese Ayuntamiento.

Se trata de Enrique Sabino Méndez con cargo de policía primero con un sueldo mensual de 20,623.11 pesos; Héctor Ismael Pelayo Sánchez quien es sub oficial con salario de 23,795.89 pesos; y el sub oficial Alejandro Muñoz Ochoa quien cobra 23,795.89 pesos en el Ayuntamiento de Tlajomulco y quienes están asignados a la custodia del hoy candidato a la alcaldía de Guadalajara, Enrique Alfaro Ramírez.

Lo más relevante de este asunto de corrupción y tráfico de elementos de Seguridad Pública, es que Alejandro Muñoz Ochoa es un mal elemento, un policía deshonesto que reprobó los exámenes de confianza de la corporación, por lo que fue dado de baja del cuerpo policiaco de Guadalajara en 2012. Además, un informe del Cisen revela que esta persona tiene nexos con el crimen organizado, hecho del cual el candidato de MC tiene conocimiento y hace caso omiso, al grado de llegar a amenazar la libertad de expresión del diario La Jornada Jalisco, que fue el medio que publicó esta información.